Los mejores discos nacionales de 2013

AnímicMejor Música Nacional 2013

Como viene sucediendo desde hace hace ya muchos años, la calidad de las producciones propias no tiene nada que desmerecer a la de los mejores lanzamientos foráneos. Aunque en los últimos doce meses han caído en nuestras manos muchos otros discos interesantes, queremos resaltar los siguientes:

1. Anímic. «Hannibal»
Guiados por la bella y doliente voz de Louise Samson, Anímic cambian el folk bucólico de su anterior «Himalaya» (2009) por un hipnótico y oscuro ejercicio de minimalismo que te envuelve lenta pero inexorablemente hasta dejarte sin aliento. Un trabajo crudo y etéreo, con ecos a nuestros Fang y a Theatre of Tragedy, para dejarse llevar y volar bien alto.

2. Lux Divina. «Possessed by Telluric Feelings»
Los catalanes firman una rotunda y brillante gema con rasgos black metal que ahonda en la espiritualidad, el misticismo y el amor por la naturaleza que pregonan algunos de los bastiones nórdicos del género.

3. Vortice. «Host»
Sorprendente tercera entrega de los barceloneses, que se reinventan para mejorar aciertos pretéritos y para enganchar aún más al oyente. Cambio de cantante y entrada de teclista mediante, su nuevo sonido se diversifica, introduce sentido melódico y estructuras más inteligibles. Resultado: su mejor y más disfrutable disco hasta la fecha. Lee la crítica aquí

4. Crisix. «Rise… Then Rest»
La joven banda se mantiene en lo alto con una nueva lección de thrash metal en la que se dan la mano los trazos más identificables del estilo y notables y visibles esfuerzos por desmarcarse de la revisión nostálgica. Todo ello servido, además, con el mejor de los envoltorios: veloz, contundente y de lo más entretenido. Lee la crítica aquí

5. Za! «Wanananai»
Sus dos integrantes parecen tener ocho hiperactivos brazos cada uno. Quienes los hayáis visto en directo sabréis bien de lo que hablamos. En su excelente nueva entrega, el hiperactivo dúo vuelve a jugar al Dr. Frankenstein mutilando y cosiendo pedazos de rock progresivo, free jazz y kraut. El resultado es tan desconcertante como adictivo.

6. Obsidian Kingdom «Torn & Burnt»
Grata reafirmación. Si con su debut, el excelente «Mantiis», ya avisaron de lo que eran capaces, con este apéndice en formato de remixes drone, Obsidian Kingdom firman un oscuro y turbador complemento de su ópera prima. Huyendo de etiquetas y clichés, con «Torn & Burnt» la banda se confirma como uno de los valores de nuestro rock más inquietos, volubles e interesantes.

[spotify id=»spotify:user:davidsabate:playlist:1KuQDBUvDWGHnv3FTrGd3m» width=»300″ height=»380″ /]