La tercera y última fiesta Ritual Cvlt Barcelona de la temporada ha contado con dos protagonistas de altura: los británicos Necro Deathmort, pioneros en la mezcla de Doom Metal y electrónica, y Dejadeath, una de las mejores bandas extremas nacionales. Antes de sus conciertos, y como es tradición en Ritual, los miembros de ambos grupos han participado en una interesante (y muy divertida) mesa redonda informal. Aquí tienes todo lo que ha dado de sí. (Puedes leer la versión en inglés aquí)
David Sabaté (Goliath Is Dead/Mondo Sonoro): ¿Cómo se os ocurrió a Necro Deathmort semejante mezcla de música electrónica y Death Metal? ¿Lo teníais claro desde el principio?
Matt Rozeik (Necro Deathmort): De hecho, no; ambos solíamos tocar en bandas convencionales de Doom Metal, con baterista y todo el rollo, y resulta que un día no vino a ensayar… (risas). Siempre hemos hecho música electrónica, así que cualquier cosa que hagamos va a tener siempre mucha electrónica. No sabemos hacerlo de otro modo.
Edgar Merigó (Ritual Cvlt BCN): ¿Os critican mucho por no ser una banda de Metal «de verdad»?
AJ Cookson (Necro Deathmort): En realidad no tanto; y es sorprendente, teniendo en cuenta el tipo de música que hacemos. La semana pasada, por ejemplo, tocamos en un festival en Leeds con un montón de bandas de Metal, y todo el mundo parecía aceptarnos. Y en verdad parece bastante aceptable, así que sencillamente vamos tirando.
Ten en cuenta también que para nosotros este formato empezó siendo el más cómodo, en el sentido que, cuando teníamos una idea para una canción, podíamos trabajar en ella en cualquier sitio en el que pudiéramos encender el portátil: en el comedor de Matt o en el estudio de un colega, en cualquier sitio. Cualquier banda «normal», hubiera dicho en ese momento «vale, y ahora pongámosle batería a esta melodía«, cuando nosotros ya habíamos acabado y estábamos trabajando en la siguiente canción.
Llegó un punto en el que acumulábamos unas quince canciones que ni siquiera teníamos intención de editar en un álbum, y ése es el motivo de que tengamos un nombre tan estúpido.
Matt: Sí, nunca se nos ocurrió que íbamos a verlo estampado en una camiseta cinco años después… (ríe).
Edgar: ¡De hecho, Dejadeath también es un nombre bastante estúpido!
Andy Kruger (Ex-Dejadeath): Significa «pereza», «desgana»; es un juego de palabras en castellano.
Matt: Oh, yo pensaba que era un juego de palabras con «déjà-vu»… (ríe).
Mr. Ax (Dejadeath): Me consta que todavía hay castellanoparlantes que no han pillado el chiste. Dicen cosas como «deijideiz» o «daijidiz» (risas).
Andy: Si no recuerdo mal, hay un DJ que se hace llamar «DJ …»
Todos: ¡¡¡…DJ DEATH!!! (risas)
Mr. Ax: ¿Sabéis lo que significa “Mort”?
Matt: Sí, significa «Muerte”… Así que, técnicamente, nuestro nombre significa «Mortífera Muerte Mortal».
Mr. Ax: ¡Lo decía porque “Mort” también significa “Muerte” en catalán!
Matt: Sí, creo que en la mayoría de lenguas románicas.
Andy: Tendríais que haberos llamado “Thanathos Necro Deathmort”.
Matt: Para fardar de Latín, sí (ríe).
David: Está claro que el sentido del humor es algo importante para ambas bandas…
Matt: Bueno, es importante en la vida, ¿no? Incluso si tocas en un grupo de Metal… Puede que incluso alguna vez haya conocido a alguien sin ningún sentido del humor.
Edgar: Yo no veo tanto sentido del humor reflejado en NDM. La primera vez que entré en contacto con vuestra música, no se me antojó para nada divertida.
David: Bueno, hay algunos títulos divertidos, como “This Beat is Necrotronic”, por ejemplo…
Edgar: Pues tienes razón…. Christo, ¿sabes que Matt conocía a Asgaroth, sorprendentemente?
Matt: ¡Sí!
Christopher Baque-Wildman (Dejadeath): De hecho, tengo un amigo de Londres que os conoce; es un miembro del grupo Indesinence, Ilia.
Matt: ¿Oh, no es el que también toca en Grave Miasma?
Christopher: No, no; ése es el baterista, Danny. Ilia es uno de mis mejores amigos. En junio iremos a ver el directo de su nuevo proyecto, Binah.
Matt: ¡Pues estaremos por allí!
Christopher: ¡Sí, nos vemos, seguro!
David: Dejadeath, esta noche tocaréis el primer concierto de vuestra carrera. ¿Por qué ahora, y por qué hoy en Ritual Cvlt BCN?
Edgar: Les hemos liado.
Mr. Ax: Sí, Edgar nos dijo que teníamos que tocar en directo como fuera, así que lo organizamos todo.
Edgar: Hay una cosa que quería comentaros… Me da la impresión de que tanto NDM como Dejadeath son proyectos que vieron la luz porque os aburríais. O, al menos, porque no teníais la responsabilidad o la presión de «estar en un grupo», y consecuentemente no tenías que enfrentaros a las expectativas de nadie. Pero ahora, paradójicamente, ambas bandas estáis empezando a adquirir reconocimiento, quizá porque os habéis sentido libres de hacer lo que realmente os ha venido en gana.
Christopher: Absolutamente. O sea, yo ya tengo treintaisiete años. No sé vosotros, tíos, pero…
Matt: Sí, treinta y tantos, también.
Christopher: Pues eso. Hemos llegado a un punto en el que lo que nos apetece de verdad es divertirnos. Sólo queremos hacer música. Para nosotros, nuestro vínculo es el sentido del humor. Reírnos de todo y a tomar por culo.
Edgar: Es como si el Death Metal fuera tan sólo un lenguaje que os resulta familiar, con el que poder expresar vuestro nexo artístico, que es en verdad el humor.
Christopher: ¡Probablemente! Sabes, nosotros crecimos con la vieja escuela del Death Metal; así que para nosotros es la excusa perfecta para volver a tener un poco de aventura, hacer vídeos, explorar cosas y enfrentarnos a todo aquello que nos jode. En realidad, el grupo empezó cuando nos juntamos en un bar para escribir letras al azar. Hasta el nombre es una puta broma, joder.
Edgar: Puede, pero ya estáis presentando vuestro segundo álbum… ¿Qué se siente al volver a tener esa responsabilidad y esas expectativas del público?
Oisin Martinez (Dejadeath): Bueno, ¡ése es básicamente el motivo por el cual nunca más volveremos a tocar en directo! (sonríe)
Christopher: Vosotros, NDM, habéis sido lo bastante inteligentes como para reducir el formato al mínimo imprescindible, para tener más oportunidades de disfrutar de ello, viajar y hacer cosas.
Matt: Sí, no incorporaríamos a nadie más. Llevamos mucho tiempo haciendo esto como para incorporar a nadie más al equipo, a no ser que sea para vigilar el merch.
Christopher: ¿Hace mucho que os conocéis?
Matt: No mucho, ¿hará como unos diez años?
AJ: Sí, diez años; supongo que en realidad sí es bastante… Empezamos a hacer música desde el mismo momento en que nos conocimos. Recuerdo que la primera vez que nos vimos, Matt tenía un montón de CDs en la mano y me dijo «escúchatelos y luego hablamos«. Yo ya conocía muchos de ellos, pero otros me abrieron las puertas a un mundo totalmente nuevo.
Edgar: ¿Por ejemplo?
Matt: Bueno, básicamente, AJ nunca había escuchado nada de Justin Broadrick ni nada parecido en aquel momento, así que le dije «este tío es básicamente tú«.
AJ: Yo estaba haciendo mucho Drum & Bass y música electrónica y Metal Industrial y cosas así; y Matt me dijo que básicamente estaba haciendo Godflesh. Yo no era consciente de ello en aquel momento; evidentemente conocía el proyecto, pero ignoraba muchas de sus facetas.
Edgar: ¿Habéis conocido al tipo, a Justin?
AJ: Sí, le perseguí por todas partes en el Supersonic… (risas) Casi nunca bebo porque me toca conducir, pero ese día no me tocaba. Así que le vi en el festival, él estaba tratando de encontrar un sitio tranquilo en el que aislarse del mundo, pero me acerqué y le endosé nuestro disco, me dijo que lo pondría en el coche… Es un buen tipo. Hemos tocado en muchos festivales en los que también tocaba él con alguno de sus proyectos, pero nunca hemos tenido oportunidad de hablar con él tranquilamente. ¡Algún día lo haremos! (ríe)
Edgar: ¡Deberías hacerle una remezcla!
Matt: Nos encantaría, sí… Incluso se nos ha pasado por la cabeza enviarle un email al respecto. A quien sí le enviamos uno fue a Mick Harris de Scorn, no obstante.
Edgar: Todavía no he superado que Mick decidiera ponerle fin al proyecto. Era uno de mis proyectos favoritos de música electrónica de todos los tiempos.
Matt: Sí, del todo infravalorado. Es un metalero haciendo música electrónica, y no hay muchos de ésos que realmente hagan buena música.
Edgar: Es el autor de una de las más elegantes y exquisitas variantes de la música electrónica, en mi opinión.
Matt: Creo que el Metal siempre llevará un retraso de diez años con respecto a la música electrónica, ya que dentro del primero sigue habiendo un montón de prejuicios contra los teclados, los sintetizadores, y todo eso rollo de ser «auténtico» para seguir sonando como en 1986, ya sabes.
Edgar: Bueno, para mí, el hecho de que Scorn toque en el Roadburn es un síntoma de que estas barreras han empezado a desaparecer de algún modo. ¡Incluso nos acabáis de comentar que vosotros tampoco os habéis encontrado con ningún tipo de rechazo por el hecho de subir portátiles y teclados al escenario!
Matt: Bueno, es verdad… Las únicas críticas que recibimos tuvieron lugar después de sacar nuestro primer álbum; algunos medios creyeron que los títulos divertidos de las canciones estaban echando a perder la atmósfera tenebrosa. No me lo tomé muy en serio, soy el puto autor, ya sabes… Escucho mucho a los Melvins, son como el paradigma de la estupidez en la música… Han hecho todo, literalmente todo lo que podría hacerse con un grupo de Rock.
Christopher: Al final, y en cuanto a las letras, todo es un poco como una broma, ¿no? Es como si tuvieras la obligación de escribir alguna cosa. Es una de esas barreras estéticas de las que parece que no puedes deshacerte nunca.
Matt: La mitad de las bandas que conozco no querrían cantar nada si no fuera porque tienen que hacerlo. Ése el motivo por el cual…
Christopher: …sencillamente ladran.
Matt: ¡Sí! Es muy molesto, cuando tienes que inventarte algo así. Yo creo que por eso la mayoría de grupos escriben sus letras en el estudio. Tienen unas cuantas canciones que han perfeccionado con la práctica, después de tocarlas un millón de veces, pero ponerles letra nunca les ha parecido divertido y lo dejan para el final.
Edgar: De hecho, vuestra elección ha sido enterrar las letras en la mezcla, de manera que no se entiende absolutamente nada de lo que decís. Creo que es más honesto, es como decir «no tenemos nada interesante que comunicar a través de la poesía, de manera que elegimos usar nuestras voces como si fueran una línea de sintetizador«.
Matt: ¡Sí, es como si fueran otra capa! O sea, yo no soy David Lee Roth, ¿verdad? Tampoco creo que quisiera serlo.
Edgar: En cambio, me da la impresión de que Dejadeath os tomáis muy en serio las letras; a pesar de vuestro sentido del humor, es evidente que queréis que signifiquen algo, que hay un mensaje.
Mr. Ax: Un mensaje para nosotros mismos, querrás decir… Por ejemplo, «Purple Dawn”, habla de la camisa de Andy (risas).
Andy: Bueno, tengo que decir que existe una grandísima diferencia entre las letras de nuestro primer álbum y las del segundo. Las del primero eran extremadamente estúpidas. Nos divertimos mucho escribiéndolas. Y creo que las del segundo… Bueno, siguen siendo estúpidas, pero les dimos un par de vueltas. Con el primero, bueno: fuimos a un bar y las escribimos, y si rima, bien; y si no…
Mr. Ax: Teníamos una canción cuyos versos acababan todos en “…ation”.
Andy: Sí, esa era muy buena (ríe).
Edgar: ¿Dónde escribisteis las letras de «¡¡¡Viva Dios!!!»?
Andy: Yo personalmente no intervine mucho en el segundo álbum, por eso es tan bueno (risas).
Christopher: Bueno, crecimos en un entorno católico, y una de las cosas más características de la Iglesia Católica es que quiere tener un gran control sobre las cosas que deberíamos hacer, lo cual resulta extremadamente ridículo. Evidentemente, en España, con el nuevo gobierno, toda esta voluntad de control está volviendo a surgir, y sencillamente no podemos soportarlo. Y como tantas otras tradiciones en España, es jodidamente ridículo y chapado a la antigua. Así que nos lo pasamos de puta madre meándonos en ello, exagerándolo y sacándolo de contexto. Como ves, tampoco le damos tanta importancia (risas).
Edgar: ¿Habéis escuchado vuestra respectiva música?
Matt: Yo sí, escuché Dejadeath una semana antes de venir.
Edgar: …y le disteis un susto de muerte, me escribió preguntando «¿estás seguro de que vamos a encajar con estos tíos? Son demasiado brutales para nosotros…».
Matt: Sí, haha. A lo largo de los últimos años, nos ha resultado más fácil tocar en festivales donde hay mucha variedad de bandas y estilos: Grind, Doom, Drone, Noise… Solíamos tocar solo en los festivales más arty.
Christopher: Creo que sonáis muy extremos.
Matt: Sí, creo que si quieres encontrar nuevos extremos de la música Metal, tienes que darte cuenta de que hay un límite respecto de lo rápido que puedes tocar la guitarra o los blastbeats… Siempre acabarás encontrándote con esa barrera. Creo que ése es el motivo por el cual el Death Metal súper técnico ha perdido tanta popularidad desde hace diez años, porque ya se han definido sus límites y se ha dicho todo lo que tenía que decirse. Hay un momento en el que no se puede tocar más deprisa, y entonces, ¿qué?
Todo el mundo sigue intentando tocar como Black Sabbath, a su manera. No ha cambiado tanto. La verdad es que, por rápido que toques, no vas a engendrar nada nuevo.
David: Hablando de Black Sabbath, alguien os ha descrito como «el eslabón perdido entre Black Sabbath y Kode9”. ¿Estáis de acuerdo?
Matt: No mucho, no (ríe). Creo que tenemos más en común con Kode9 que con Ozzy, la verdad.
David: Vuestra estética musical hace que podáis tocar tanto en Sónar como en Roadburn, ¿qué audiencia os gusta más?
AJ: Bueno, eso nunca lo sabes; hemos tocado conciertos que creíamos iban a ser muy mierdosos y al final han sido geniales, nunca se sabe.
Una vez teloneamos a Atari Teenage Riot y, a lo largo de todo nuestro concierto, había un tipo en primera fila con los puños alzados y los pulgares hacia abajo. Matt me estaba mirando todo el rato, en plan (hace una mueca de disgusto, todos ríen). Así que acabamos de tocar y Matt me dice «venga, larguémonos de una puta vez, metamos todo en el coche y démonos el piro«. Y mientras estábamos cargando el coche, vemos que el tipo de los pulgares hacia abajo sale de la sala, realmente cabreado, viene hacia nosotros y nos dice «tíos, ha sido LA HOSTIA» (risas). Así que le pregunto «tío, ¿entonces por qué tenías los pulgares hacia abajo?», y me responde: «bueno, me pareció que era lo más correcto, ¿no? Los pulgares hacia arriba hubiera sido demasiado alegre, no va con vuestro rollo» (siguen las risas).
Y cómo no, ha habido conciertos que creíamos que habían ido de puta madre en los que el público sencillamente nos había ignorado por completo, en realidad. Nunca se sabe.
Edgar: Muchachos, muchísimas gracias; me gustaría que pudiéramos quedarnos charlando un rato más, pero ha llegado la hora del espectáculo.
Matt: ¡Vamos a tocar!
Todos: ¡Sí!
Texto: Edgar Merigó / Fotos: Eduard Tuset